Soñadores.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Todo un sueño.

Todo empieza cuando le ves. Corres hacia él, con ganas de besarle, pero te contienes y le abrazas, quieres que sea él el que lo haga. Transcurre un rato y te coge, quiere llevarte lejos, donde solo estéis él y tú. El simple hecho de pensarlo te emociona y no dudas en decir que sí. Poco a poco os alejáis y los demás son conscientes de ello. 
Al rato acabáis sentados a orillas del río, sin saber como, acabáis acurrucaditos el uno junto al otro. No sentís frío y os cortáis la circulación mutuamente. No había pasado nada entre vosotros desde hace tiempo, y de repente volvéis a caer. Os besáis. Como un día os prometisteis no sería la última vez. Seguís caminando, él te agarra y tú sonríes. Eres esclava del amor. Él te hace sentir segura y eso te gusta. Te propone ir a su casa y aceptas encantada. Él no tiene prisa contigo, solo quiere disfrutar el momento. 
Sin saber como, acabáis en su cama, él está medio sentado y tú te tumbas encima de su tripa. Te transmite seguridad y confianza. Entonces, se produce un silencio profundo y os miráis. Vuestros ojos rebosan felicidad. Él se acerca a tus labios, tú te quedas quieta y os besáis. Os sumergís en un profundo beso que tanto el uno como el otro tenéis la certeza de que no será el último. 
La gente lo ve raro, no comprende que os queráis pero no estéis juntos. Ellos lo ven fácil. Hay dos opciones, o os olvidáis o estáis juntos, pero no es así. Hay muchos peros y pegas. Todo está en vuestra contra, pero sois cómplices del amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario